Cuando el Silencio Me Llama...

Es mejor llegar al final tras una carrera lenta, que no llegar por ir más rápido.

Tontos haberlos haylos, qué te voy a decir; si alguna vez pretendes reírte de algún tonto ríete de ti porque tal vez te diviertas más.

 

Si nos abrazamos, aunque sea en silencio, comprenderemos mejor que el camino en solitario es más costoso que acompañado.

Seguimos en guerra. Puede parecer que ya nos acostumbramos al parte diario de las bombas, los disparos, silbando en la lejanía de Ucrania mientras sus gentes abandonan como pueden las ciudades,  dejando atrás sus vidas y otros quedan tendidos entre los cascotes de la barbarie. Han pasado más de 30 días y la mentalidad del destructor, del invasor, no se ha vaciado de ese maligno ansia de poder. Es el mayor ataque militar sobre suelo europeo tras la II Guerra Mundial. ¿Para qué? No llego a comprenderlo.  El pueblo ucraniano resiste, valiente, a ser masacrado. Desde mi punto de vista, ya han ganado la guerra. Todos sabemos quién la ha perdido, por muchos tanques y amenazas que desprenda. Nos pilla lejos, podría parecer, pero está ahí a lado, defendiendo lo que no muchos somos capaces de defender porque nos creemos en una posesión infinita de ello: libertad . Pueblo. Sensaciones de pueblo . Salgo al patio, hace frío. La mañana ha despertado como con neblina. Los adoquines están mojados y

Lo que damos desinteresadamente es lo que nos va a definir en nuestras vidas. ¿Y tú qué piensas? ¿Estamos dispuestos a dar sin esperar nada a cambio? Intentémoslo.

Todo va y todo viene. La vida es un continuo movimiento y un cambio constante. Por eso lo que es hoy no tiene por qué ser mañana.

Llegados a estos días no sé muy bien qué pensar: destrozar las emociones o avivar el fuego de la poesía. Para el ambiente frío lo mejor es que nuestros versos enciendan las emociones más positivas y cálidas en este invierno.

Llegar a entender que hay cosas que merecen la pena, cosas que son importantes y cosas innecesarias y que no importan, es saber vivir mentalmente equilibrado.

No pasa nada por equivocarse, tampoco por reconocerlo y mucho menos por disculparse. ¿Quién no se ha equivocado, de palabra, de una decisión, de un hecho? Lo valiente es rectificar y no darse la vuelta.

En todo y como en todo, si vas siempre acelerado terminas por romper el motor.

 

Es cierto que las personas buenas poco o nada sospechan de la maldad de los demás. Aún así siempre es mejor ser bueno, que no imbécil, e identificar cuanto antes a esos malos interesados.

Entierra tu verdad y verás cómo echará raíces y crecerá. Entierra una mentira e infectará todas las verdades que hubieras plantado.

Escucha el silencio, todas las cosas se pueden convertir en una melodía agradable cuando las miras desde la perspectiva del amor.

A nuestros hijos la única herencia que podemos dejarles son nuestros actos y nuestro legado. El dinero se irá junto con las posesiones. Nuestros hechos, no solo nos engrandecerán sino que quedarán siempre.

No hay cosa que más me fastidie que saber te estás equivocando en algo y seguir empeñado hasta que te das la hostia. Simplemente es de estúpido.

El conocimiento de cada uno lo da el día a día. Ni uno es más ni uno es menos… pero los hechos siempre son los que son.

Siempre pensé que los versos brotan del alma purificada. No es así. La poesía, simplemente, surge de la belleza de la existencia, emocionalmente abrazada por el alma del Ser.

Si queremos estar más organizados, lo primero que debemos tener claro es lo esencial.

 

La virtud está siempre en la calma. Antes respondía y hablaba sin control. Ahora creo que, dependiendo de a quién, si suma o me resta.

No esperes a que llegue el momento perfecto, acabarás esperando toda tu vida. Coge lo que tienes y empieza ya.

Si no dependes de nada ni de nadie, no serás vulnerable y nunca perderás nada. Sufrirás menos.

Si contemplas algo con la emoción de un poeta, encontrarás la belleza hasta en los rincones más oscuros.

 

¿Quién no ha sentido nunca un deseo de escapar y dejarlo todo, de correr y correr sin mirar atrás, de decir se acabó y hasta aquí hemos llegado? Mandarlo todo a la mierda. ¿No? Pero seguimos aquí.

La única forma de acercarnos a la verdad es observar lo que sucede en nuestro corazón y en nuestra mente. Simplemente parar y observar.

Todos tenemos a veces sensaciones de resistencia en nuestra vida. Por qué no te preguntas ¿qué tienes que aceptar que no estás aceptando?… En la respuesta está la solución.

 

A todos nos gusta decir y opinar cómo debe ser un gran hombre… pero, ¿por qué no somos uno de ellos y damos ejemplo?

Siempre he sido un poco escéptico sobre lo que piensan las mayorías. Me equivoqué cuando desconfiaba, y no creía, que el virus COVID nos invadiría. Me he vuelto a equivocar cuando pensé, y afirmé, que jamás Rusia invadiría Ucrania. Nunca imaginé que hoy estaríamos así, viviendo en vilo por el absurdo afán imperialista de un demente al mando de un país como Rusia. Duodécimo día en guerra . Tampoco pensé que esto duraría tanto y, por ende, generaría tantísimo sufrimiento. Tiempos grises, oscuros, en los que parece la sombra nos engulle con fuerza. El llamado primer mundo, el mundo del progreso, está en guerra. Ego, dominación, codicia, prepotencia. Todos tenemos un poquito de todo esto y por eso, y por ello, tal vez, estamos como estamos. El siglo XX nos dio a Hitler, el XXI nos ha regalado a Putin. Las guerras me producen pena, todas. Los pueblos, los ciudadanos, me producen respeto, todos. Los dirigentes que llevan a sus pueblos a las guerras me producen asco. Estamos en Guerra. Una g

Es difícil ver una oportunidad con los ojos, se suele ver con la mente.

Nunca debemos dejarnos llevar por la cabeza porque es el corazón el que debe marcar nuestros pasos. Todo lo que se convierte en pensamiento estúpido termina por minarnos por dentro y destruir nuestra estabilidad.

El coraje solo se alcanza luchando contra nuestros miedos internos. Es una oportunidad para encontrar ese poder que todos llevamos dentro: confianza y valor.

Que sí, que el mundo es cansino, que el día a día nos derrota, pues para y coge aire… luego sigue caminando. Verás que las hojas de ese árbol,  cuando caen, es para que otras broten.

Tengo la sensación de que no tengo tiempo para nada, tal vez sea por que el tiempo es lo único que no vale nada si no lo utilizas como se debe.

La relación más importante de tu vida es contigo mismo. De esa relación vienen todas las demás. Confiando en ti, confiaras en los demás.

Lideramos nuestra vida cuando nos apoyamos en las fortalezas de nuestro carácter. A veces nos forzamos para convertirnos en quienes no somos realmente. Los miedos nos atrapan sin permitirnos ser.

 

Admiro a las personas valientes, que arriesgan y emprenden. También admiro a aquellos que buscan el silencio y la calma, que emprenden hacia dentro sin el deseo de lo externo.