28.02.2019... Falta de sangre!
Últimamente parece que asumo que exprimir los días al máximo se convierte en una constante. Eso genera que la mente y el cuerpo lleguen al final de la semana totalmente extasiados y rozando el límite de lo poco saludable. Comencé la semana pasada, por enésima vez, mis ejercicios de meditación porque la ansiedad y las pulsaciones me vencen y preocupan. Más o menos estoy consiguiendo resultados aunque la cabeza me estalle en mil y un pensamientos, proyectos, errores, fracasos y alguna victoria. Es mi día a día y así, mirando hacia atrás, ha sido siempre. Es la sangre lo que lleva a unos por caminos que del no parar. Charco tras charco. Otros, en cambio, prefieren la vida contemplativa y qué queréis que os diga, de seguro gozan de más felicidad. En mi pueblo, a los que están acelerados, creando, ilusionados en sus proyectos, inquietos, se dice tienen sangre. Por el contrario, aquellos que son parados, que están como mustios, apagados, que les cuesta hablar, se dice que e