Dice Mozart que...

"... nunca que acuesto sin pensar que, a pesar de lo joven que soy, quizá al día siguiente ya no exista; sin embargo, de cuantos me conocen, nadie puede afirmar que sea persona de trato desabrido o melancólico. Y esta felicidad, por la que día tras día doy gracias a mi Creador, se la deseo de corazón a todos y cada uno de mis semejantes."

Comentarios

Por si te interesa...

Padre Nuestro en Hebreo

Cinco maneras de organizar un libro de poemas.

Diario de un Estoico II. La posibilidad de lo imposible. Semana 30

Diario de un Estoico II. La posibilidad de lo imposible. Semana 29