Muchas veces nos hacemos valientes y decimos eso de que no hay nada ahí arriba que nos guarde. Yo soy uno de ellos. Pero cuando lo necesitamos, y no por nosotros, sí por quién queremos, Le pedimos que esté siempre a su lado.

Comentarios

Por si te interesa...

Padre Nuestro en Hebreo

Diario de un Estoico II. La posibilidad de lo imposible. Semana 35

Diario de un Estoico II. La posibilidad de lo imposible. Semana 33

Cinco maneras de organizar un libro de poemas.

Diario de un Estoico II. La posibilidad de lo imposible. Semana 34