Nos quejamos continuamente sin pensar que somos unos privilegiados. Hay personas que viven verdaderas desgracias y a lo mejor, ni siquiera se quejan. ¿Por qué? Porque siempre hay esperanza.

Comentarios

Por si te interesa...

Padre Nuestro en Hebreo

Diario de un Estoico II. La posibilidad de lo imposible. Semana 38

Diario de un Estoico II. La posibilidad de lo imposible. Semana 39

Diario de un Estoico II. La posibilidad de lo imposible. Semana 41