Sigamos hacia delante, tropecemos una y mil veces más, porque nunca será una caída o un fracaso, será el aprendizaje para no volver a caer.

Comentarios

Por si te interesa...

Padre Nuestro en Hebreo

Cinco maneras de organizar un libro de poemas.

Diario de un Estoico II. La posibilidad de lo imposible. Semana 30