08.08.2018... Reflexiones desde el Ocaso de Minaya y... VI.

Me he encontrado escribiendo, en esta tarde de agosto, entre ventosa y bañada por uno de esos soles que nos proponen calor. Es verano. 

Escribir me sigue provocando una sensación de paz, casi de equilibrio. Escriba lo que escriba, sea una gilipollez o no, me relaja, me genera calma y me permite olvidar esa cantidad de momentos negativos que uno va acumulando en sus espaldas. 

Por aquí despiertas cada día con el mismo sonido de las campanas de la torre de la iglesia. Tratas de recordar sueños que tal vez no has llegado a tener. Siempre se sueña. 


Aquí te das cuenta que no hace falta mucho para ser, para tener. Que da igual lo que lleves puesto, que nadie se fija en como vas o en cómo vienes. Si vas peinado o despeinado; si la camiseta hace juego con el pantalón. Simplemente estás, como uno más, aquí y ahora. 

Estar presente en el instante. Sentir tu presencia interior en cada cosa que haces. 

Si nos concentramos en lo que hacemos ganaremos tranquilidad y serenidad. 

Todos tendemos a ponernos metas o grandes retos. Creo es importante y que te inducen y generan una pasión por el vivir pero lo más importante de todo, lo que realmente nos hace crecer en el día a día son las cosas que hacemos con nuestro yo interior. 

Las pequeñas cosas nos cambian, los grandes acontecimientos no. 

Concentrarse en el momento, en las pequeñas cosas, te hace disfrutar de tu instante. 

Nos llenamos la cabeza de grandes proyectos pensando que de ello depende nuestra vida y olvidamos esos pequeños detalles, mínimos, que nos hacen crecer por dentro y que de eso sí depende la felicidad de nuestro camino. 

La felicidad está en las acciones mínimas. 

Hacemos un esfuerzo terrible en buscar aquello que creemos nos falta. Nuestro gran tesoro está aquí, dentro de nosotros, en el instante. 

Relájate, disfruta, vive el día a día. 
Liderarte es ser capaz de disfrutar de las mínimas acciones que llenan tu vida. 
No está bajo tu control que ocurran las cosas; sí lo está tu respuesta a lo que ocurra.

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