Nada más bello y poético que salir a la calle y contemplar el brillo de ese cielo inmenso que parece nos habla solicitándonos calma. La calma, qué necesidad en estos tiempos.

Comentarios

Por si te interesa...

Padre Nuestro en Hebreo

Diario de un Estoico II. La posibilidad de lo imposible. Semana 33

Cinco maneras de organizar un libro de poemas.

Diario de un Estoico II. La posibilidad de lo imposible. Semana 34