10.09.2017... Buenos hábitos.

Comenzamos el curso profesional viajando así que escribo estas líneas, mientras se apaga el día, en esta bella y hermosa ciudad de Santander. De los viajes se aprende, se vive y se siente aprovechando, al menos, poder caminar por esas calles y rincones por los que habitualmente uno no lo hace. 

Los viajes en domingo son algo tristes. Termina la semana y aprovechas para reflexionar sobre lo que ha sido sin darte cuenta que ya has comenzado otra. Pero el trabajo es un privilegio.

Es curioso como, nada más comenzar, vamos olvidándonos de la tranquilidad y el sosiego y nos metemos de cabeza en los líos, en los mil y un proyectos, que nos merodean y acompañan. He iniciado esta temporada lleno de propósitos pero, sobre todo, con uno muy claro: afianzar aquellos buenos hábitos que uno tiene y cambiar de hábitos poco saludables mental o físicamente.



Preparo últimamente una clase sobre las decisiones. Lo difícil que nos es tomar decisiones, aunque sepamos que éstas afectan de manera positiva, sobre todo a la larga, a nuestras vidas. Y a veces, para tomar esas decisiones lo único que debemos de hacer es pararnos un instante, ver cómo estamos y cómo queremos vernos en un futuro. Si nos queremos ver igual está claro que no vamos a dar el paso de cambiar, decidir cambiar. Pero ¿a alguien le gustaría estar exactamente igual que está en los próximos años? ¿No cambiaríamos nada?

Si queremos cambiar algo desde hoy debemos caminar hacia ello.

Una de las cosas esenciales que debemos hacer es anotar nuestras metas y objetivos, a corto, medio y largo plazo. Tenerlos muy claro.

Si tenemos nuestra mente continuamente enfocada en nuestros problemas, difícilmente vamos a enfocarnos en conseguir lo que queremos.

Si lo que quieres lograr es importante, tienes que pagar un precio.

Confiar con humildad en nosotros.

Por ejemplo, reflexionar sobre nuestros 3 temas prioritarios para este mes de septiembre y, seguidamente, planificar el tiempo que le dedicaremos la próxima semana. 

No entretenernos en temas que solo nos hacen perder el tiempo. Que lo que hagamos nos enriquezca en algo, para bien, que nos vaya llevando a ese gran objetivo final del que queremos obtener grandes resultados.
“El secreto del éxito es persistencia por la meta.” Benjamin Disraeli
Disciplina y confianza.

En estas notas que, como digo, voy tomando mientras preparo esa una ponencia sobre las decisiones y los hábitos, he escrito una especie de tips, de hábitos, que recomiendo y que conforman lo que yo creo o quiero llevar a cabo y, por ello, también lo aconsejo. 

Pueden resultar obvios, fáciles, pero no todos somos capaces de llevarlos a cabo. Yo lo intento día a día, de hecho los releo cada semana, trabajo para conseguirlo y, sin duda, no dejare de hacerlo.

Están escritos en desorden ya que es una lista que posiblemente aumente algo más antes del trabajo final, pero de momento los comparto con todos.

Estos serían mis hábitos prioritarios:

1. Caminar / correr / subir escaleras andando. Aprovechar cualquier momento para activar el cuerpo. No dejes de moverte.

2. Beber un baso de agua templada con limón en ayunas.

3. Meditar, aunque sea mal.

4. Ir a dormir pronto.

5. No ver demasiada televisión.

6. Reflexionar en soledad al menos 30 minutos al día.

7. Dormir no más ni menos de 7 horas.

8. Dar gracias por el día antes de dormir.

9. Dedicar tiempo a la lectura de textos espirituales, filosofía o poesía.

10. Tratar de aprender algo nuevo cada día.

11. Aceptar los problemas y enfrentarme a ellos.

12. No dejar nada para mañana.

13. Priorizar tareas. Organiza los días.

14. Aprender a decir No.

15. Cambiar el café por el té.

16. Llamar a tus padres y hermanos con frecuencia.

17. No acostarte enfadado con nadie.

18. Evitar las bebidas alcohólicas de alta graduación. Beber un poquito de vino.

19. Comer de manera saludable y, sobre todo, comenzar a comer fruta.

20. Beber más agua.

21. No desperdiciar comida.

22. Aprender a escuchar antes de hablar.

23. No criticar ni prejuzgar a nadie.

24. Perdona y no seas rencoroso.

25. Quererme mucho.

26. Escribe cada día, lo que sea, aunque creas que no tiene sentido.

27. Tener proyectos, ilusiones.

28. Reír todo lo que pueda.

29. Salir al campo siempre que tengamos oportunidad. Respirar.

30. Dedica tiempo para ti, para tus hobbies.


Cumplir estos 30 hábitos que, de seguro, la gran mayoría de vosotros ya los cumple, para mi significa un propósito para este curso que comenzamos. Algunos de ellos los llevo a rajatabla, pero otros muchos no.

Que mejor que terminar esta semana así, aunque sea lejos,  pero compartiendo estas cosas.

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