Dice Osho que...

"No hay una diferencia cualitativa entre el mendigo, el emperador y tú. Lo único que los separa son elementos externos: la ropa, los títulos, el elefante sobre el que se sienta el rey, y el mendigo con sus harapos. Pero no son estos los que marcan la auténtica diferencia.
En tu interior descubrirás una tranquilidad, una serenidad, un silencio... un tesoro inconmensurable. Cuando lo descubres, te das cuenta de que todo el mundo posee ese tesoro; la cuestión es si lo sabes o no."

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