Una de esas vagas reflexiones que uno se ha hecho estos días es saber si quiero estar dónde estoy. Porque ya no importa dónde estaba, sino donde quiero estar.

Comentarios

  1. Son reflexiones que solemos dejar pasar y que tienen buena utilidad cuando tenemos una edad temprana; porque hay mucho tiempo por delante para preparar lo que hoy podríamos haber conseguido en base a nuestros deseos. Por lo menos allí estaban abundantes posibilidades a las que hoy no alcanzamos. ¡El tiempo es oro! Y hoy tenemos menos. ¡Eso es lo que hay!.
    A veces…’Nunca es tarde’. Lo que creamos que aún podamos conseguir… por probar que no quede. Porque…
    ‘Tú sí que vales’.

    ResponderEliminar
  2. Si aparcaste el lugar de una determinada época y pasaste página, a ver si es verdad que no te importa dónde estuviste. Lo demás es otro cantar, el cual es normal y te viene bien darle vueltas.
    Suerte para los resultados de las ideas derivadas por tus reflexiones.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Por si te interesa...

Padre Nuestro en Hebreo

Cinco maneras de organizar un libro de poemas.

Diario de un Estoico II. La posibilidad de lo imposible. Semana 30