Querido hijo...

Piensa y medita siempre antes de hablar. No dejes que tu lengua te desobedezca, podrás arrepentirte.

Comentarios

Por si te interesa...

Padre Nuestro en Hebreo

Cinco maneras de organizar un libro de poemas.

Diario de un Estoico II. La posibilidad de lo imposible. Semana 30

Diario de un Estoico II. La posibilidad de lo imposible. Semana 29