No hay más que un camino que seguir y un solo objetivo como destino, lo demás son veredas que debemos saber conducen a ese camino y por lo tanto a tal destino. Mas a veces, nos enajenamos entibiando nuestros convencimientos anteriores y desviándonos de lo que solo y hasta ese momento ha sido mejor para nosotros. Son dudas pasajeras propias en el hombre. Escribe lo que quieras y cuando quieras y como mejor lo creas y si no, tampoco lo hagas. Haz cuanto te parezca; Yo te apruebo, tu destino es bueno, por lo tanto no te importe saber hacia dónde vas, ya lo sabrás cuando llegue cada momento. Y una vez más: ¡No tengas miedo!. El hombre tiene, sin quererlos, comportamientos diferentes en tiempos distintos. No es pequeña ni corta la lucha diaria que mantiene con el resto y con él mismo. Así es nuestro mundillo, Jose. Hay quienes dicen: ¡Si yo te contara! Y creo que ello es común a todos nosotros. Yo también escribo mucho sin tener conciencia del destinatario,; tampoco, como a ti, no sé para qué ni para quién, y en este punto se me acerca la nostalgia, lo dejo, y así de vez en cuando abro nuevos escritos con nuevas ideas y cómo en los demás, si ningún destinatario. Pero no importa, creo a veces, tal comportamiento puede ser confesarse a sí mismo. Un fuerte abrazo.
Åvinu shêbashåmaím, yithqadesh Shimkhå, Tåvo Malkhuthkhå, ye'åsê Retsonkhå kevashamaím ken bå'årêts. Êth lêkhêm khuqenu ten lånu hayom. Uslakh lånu 'al khatå'eynu kefí shêsolkhím gam anakhnu lakhotím lånu. Vë'al tëvi'enu lidey nisåyon, ki 'im khaltsenu min hårå. Ki lëkhå HaMamlåkhåh, HaGvuråh vëHaTif'êrêth lë'olmey 'olåmím. Åmen. El Padre Nuestro es una de las Oraciones más bellas que existen. Eso pienso. Me he interesado últimamente en buscar por ahí la Oración en hebreo. No es fácil y estoy encontrando algunas diferencias entre unos y otros. Aunque por aquí dejo algunos ejemplos , me gustaría, si alguién tiene a bien, recibir sugerencias del auténtico Padre Nuestro en len gua hebrea. Es posible que sea alguno de éstos, pero tengo mis dudas. (la transliteración se lee de izquierda a derecha) Abienu shebashamayim yitkadesh shimcha, tabo malchutecha, yease retsoncha ba’aretz kebashamayim . Ten lanu et lechem yoman, uslach lanu al chataeinu, kefi ...
El mayor bien que poseemos es la salud, solo nos damos cuenta cuando nos falla. Para tener salud, irremediablemente, hay que cuidarse. No hacer tanto el imbécil, de manera innecesaria. Ya no somos críos.
Comienzo una serie de post en los que recopilaré alguna información sobre símbolos que siempre me han interesado y que tienen algún significado para mi. Voy a comenzar con ese símbolo del ojo en el triángulo equilátero, El Ojo que todo lo Ve . Un símbolo que se encuentra en muchas culturas pero, sobre todo, es un símbolo utilizado por la tradición cristiana y por la masonería. El lugar más común para verlo es en el billete de dólar americano, en algunas catedrales del medievo y en las fachadas de los grandes templos masónicos. El triángulo equilátero, debido a su regularidad y sus tres lados iguales, se le considera como símbolo de la Trinidad: Tres lados perfectos unidos en un sólo propósito; y por otro lado, el círculo en el cual está inscrito es universalmente considerado como un símbolo de eternidad y perfección, un elemento que no tiene principio ni fin, por lo cual una posible interpretación de la representación completa es que es un símbolo de la visión de la Divini...
No hay más que un camino que seguir y un solo objetivo como destino, lo demás son veredas que debemos saber conducen a ese camino y por lo tanto a tal destino. Mas a veces, nos enajenamos entibiando nuestros convencimientos anteriores y desviándonos de lo que solo y hasta ese momento ha sido mejor para nosotros. Son dudas pasajeras propias en el hombre. Escribe lo que quieras y cuando quieras y como mejor lo creas y si no, tampoco lo hagas. Haz cuanto te parezca; Yo te apruebo, tu destino es bueno, por lo tanto no te importe saber hacia dónde vas, ya lo sabrás cuando llegue cada momento. Y una vez más: ¡No tengas miedo!.
ResponderEliminarEl hombre tiene, sin quererlos, comportamientos diferentes en tiempos distintos. No es pequeña ni corta la lucha diaria que mantiene con el resto y con él mismo. Así es nuestro mundillo, Jose. Hay quienes dicen: ¡Si yo te contara! Y creo que ello es común a todos nosotros.
Yo también escribo mucho sin tener conciencia del destinatario,; tampoco, como a ti, no sé para qué ni para quién, y en este punto se me acerca la nostalgia, lo dejo, y así de vez en cuando abro nuevos escritos con nuevas ideas y cómo en los demás, si ningún destinatario. Pero no importa, creo a veces, tal comportamiento puede ser confesarse a sí mismo.
Un fuerte abrazo.