Siempre pensé que para ir rápido era mejor caminar o correr solo, aunque lo cierto es que así uno nunca sabe si llegará o no a su destino; en cambio tengo claro que para llegar lejos lo mejor es ir acompañado.

Comentarios

Por si te interesa...

Padre Nuestro en Hebreo

Cinco maneras de organizar un libro de poemas.

Diario de un Estoico II. La posibilidad de lo imposible. Semana 25

Diario de un Estoico II. La posibilidad de lo imposible. Semana 26

Diario de un Estoico II. La posibilidad de lo imposible. Semana 27