Las apariencias no engañan. Eso he pensado al leer esta mañana, en toda la prensa, la noticia de cómo unos cientos de extremistas, escondidos en bufandas de 'solidaridad' u 'ONGs Pacifistas', herían e impedían que un empresario israelí, Eytan Levy, participara en un encuentro hispano israelí en el Parque Científico de Madrid, en la Universidad Autónoma. Encuentro que, finalmente, no se celebró por la irrupción en el mismo de varias decenas de jóvenes que, según ellos, abanderan eso que llaman, pero ni entienden ni saben ni conocen: derecho a la libertad de expresión, respeto y, ante todo, paz.
Osea que estos son los pacifistas. Estos que se lían a patadas con todo lo que pillan, incluso con un ciudadano israelí por el mero hecho de no pensar como ellos. ¿Ustedes se imaginan si hubiera sido al revés? Yo, personalmente, lo condenaría de igual manera. La violencia nunca debería tener justificación. En este caso, además, puediera existir alguna diferencia,. tampoco justificativa, faltaría más: ¿alguna de estas agrupaciones, escondidas bajo falsas apariencias, están subvencionadas con dinero público? Es posible que sí.
Recomiendo que lean el post del amigo Juan en su bLOG Dandoelcante y que titula "¡Palestina Libre!". Y como le he comentado, mientras existan políticofaroleros que envuelven su radicalidad y extremismo, en ocasiones con justificaciones terroristas, en falsos pañuelos blancos… será imposible. Resulta curioso observar como bajo estos falsos ideales progresistas, de extrema izquierda en su mayoría, embutidos en bufandas subvencionadas por administraciones que reparten el dinero de todos, se lo gastan ‘tan ricamente’ en apoyar a aquellos que jamás han defendido ni defenderán las más esenciales libertades.
Yo pienso que no todas las ideologías son buenas... hasta ahí puedo leer (que lo que el running une no lo separe las urnas y aquí pasamos de todos los colores).
ResponderEliminarDesde luego, el problema palestino no tiene nada que ver con lo que energúmenos como esos hacen y predican. Un violento envuelto en ideas políticas no hace política, sino violencia, y esos son todo iguales, mañana puede estar haciendo lo contrario o en un campo de futbol, para este tipode gente lo esencial es la violencia, no hay más.
De acuerdo contigo: lo que el running une no debe separarlo nada y menos las ideas. Está claro que cada runner tiene las suyas pero lo importante es el respeto, la libertad y, sobre todo, lo que une: sea el correr, sea la música, la literatura, la vida.
ResponderEliminarNo conozco a nadie que no tenga sus ideas, su ideología, sus preferencias en política aunque las niegue. Lo que yo siento, ahora mismo, es que no se pueden utilizar ciertos 'foros sociales' para esconder radicalidad: sea futbol, sea lo que sea...
Siempre he estado del lado de las minorías, pero de las minorías que defienden la libertad, la democracia, la vida y los derechos fundamentales de la persona. Aquellos que dicen una cosa y luego apoyan dictaduras que maltratan con sus políticas a las mujeres, a los homosexuales o encarcelan a los que no piensan como ellos... lo siento pero por ahí no paso...
Running sí... siempre!