Jubilación de zapatillas Mizuno; nuevas Mizuno.-




Siempre da pena deshacerte de aquello que se adapta a ti, llegas a coger un cariño especial. Te acompaña en momentos duros, te defiende de adversidades del terreno y, en los momentos de alegría, le exiges más. Son mis zapatillas de correr, mis últimas zapatillas. Durante algo más de 1.200 km me han acompañado sin protestar. Cómodas, acopladas a mi como un guante, sin rechistar y aguantando todo tipo de improperios terrenales y climatológicos: Mizuno Wave Rider 12.


Siento pena y lo que he hecho ha sido jubilarlas, nunca tirarlas. De vez en cuando las sacaré del letargo y descanso para rodar algo con ellas. Pero los RR.MM. trajeron su joven repuesto. Un repuesto al que ando acostumbrándome estos días porque el peso y robustez es algo mayor que el de las anteriores, aunque creo que para mis molestias en rodillas y tobillos mejorará: las Mizuno Creation 10.


De la misma familia, Mizuno, para qué cambiar de marca si estoy contento con ellos. Además tengo mis Nike LunarGlide+ ligeras para salidas cortas y algo más rápidas, y opino que para el asfalto y la acumulación de kilómetros estas serán excepcionales. Veremos a ver y ya comentare. Lo dicho, hasta ahora llevo una semana de rodaje con ellas, adaptándome poco a poco y, de momento, la cosa no va mal. Algo más pesadas, se nota, pero sí es cierto que al finalizar no siento tanta molestia muscular.

Como en todo habrá opiniones. Para correr es fundamental encontrar la zapatilla que se adapte a cada uno. No es fácil.

Comentarios

  1. 1200 km era demasiado, con 800 es suficiente para que pasen a mejor vida, por mucha pena y nostalgia que te entre, verás como lo notas.
    Un abrazo y a machacarlas

    ResponderEliminar
  2. El Rey ha muerto, larga vida al Rey¡¡¡, ya contarás cómo te funcionan las Mizuno. Seguro que el extra de amortiguación te vendrá bien, y en cuanto te acostumbres no te vuelves a poner las Lunar.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Por si te interesa...

Padre Nuestro en Hebreo

Cinco maneras de organizar un libro de poemas.

Diario de un Estoico II. La posibilidad de lo imposible. Semana 30

Diario de un Estoico II. La posibilidad de lo imposible. Semana 29