y quedará...

y quedará
el tenue susurro de tu perfume
atado a los vientos
y colgado del aire

ese aire que respiro
y vivo
cada vez que te recuerdo
que es siempre
sobre todo cuando impongo
en mi vientre
la presión de todos esos alientos
que tu cuerpo
en un gritos jadeantes
desahuciaba.

y quedará
quedará
marcada la esencia
de tu mirada
proyectada en la mía

buscando
cada una de esas gotas
de vida
que sólo tu cuerpo derrama.

y quedará...
quedará todavía
tu voz
y la mía.

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