Sólo cuando has muerto dejas de tener sueños. Cuando dejas de tener sueños dejarás de tener cosas que realizar. Si cada día te levantas sin tener nada nuevo que intentar hacer, aunque sólo sea el instante, entonces vivirás como un muerto. Vivir como un muerto no es vivir.

Comentarios

Por si te interesa...

Padre Nuestro en Hebreo

Cristianismo de moda, christiancore, o síntoma