Creo haber paseado
por estas calles,
sin rumbo,
sin norte
ni este,
en algún sueño.
Creo haber vivido
esta sensación,
deambulante,
alguna otra noche.
Creo que todo esto
que veo,
perdido,
ya lo he visto.
Y si lo que creo
es que todo lo que piso,
frío y distante,
ya lo he pisado antes
y lo había olvidado,
otra vez,
tal vez lo que miro
en este mundo
también
lo había mirado
de otra forma
en otro tiempo
en otra distancia
en otros sueños.

Comentarios

Por si te interesa...

Padre Nuestro en Hebreo

Cinco maneras de organizar un libro de poemas.

Diario de un Estoico II. La posibilidad de lo imposible. Semana 30