Para sentir es imprescindible escuchar. He despertado entre sonidos de campanas y el cantar diferente de los pájaros. No sabía dónde estaba, pero he querido quedarme ahí.

Comentarios

Por si te interesa...

Padre Nuestro en Hebreo

Diario de un Estoico II. La posibilidad de lo imposible. Semana 38

Diario de un Estoico II. La posibilidad de lo imposible. Semana 39

Diario de un Estoico II. La posibilidad de lo imposible. Semana 41