Hay días en los que te provocan el enfado cuando no habría motivo para ello. Pero enfadarse también es un derecho personal, aunque no se haga habitualmente. Es un modo de protesta.

Comentarios

Por si te interesa...

Padre Nuestro en Hebreo

Diario de un Estoico II. La posibilidad de lo imposible. Semana 35

Diario de un Estoico II. La posibilidad de lo imposible. Semana 33

Cinco maneras de organizar un libro de poemas.

Diario de un Estoico II. La posibilidad de lo imposible. Semana 34