Pensar dos veces tiene más valor que hacerlo una. Decidir por impulso es tan peligroso como no decidir. Vale más la calma y una buena mente despejada.

Comentarios

Por si te interesa...

Padre Nuestro en Hebreo

Diario de un Estoico II. La posibilidad de lo imposible. Semana 33

Cinco maneras de organizar un libro de poemas.

Diario de un Estoico II. La posibilidad de lo imposible. Semana 34