Vivimos y por ello debemos aceptar y mirar de frente, sin esquivar, todo lo que nos vaya llegando. Es verdad, a veces es una putada. Por eso disfrutemos los buenos momentos y encajemos los golpes inesperados. Duelen, pero que nos espabilen para que no venga el siguiente.

Comentarios

Por si te interesa...

Padre Nuestro en Hebreo

SIMBOLOGÍA: 'EL OJO QUE TODO LO VE'

Cinco maneras de organizar un libro de poemas.