Con nuestros pensamientos y acciones vamos creándonos, nosotros mismos, nuestro cielo e infierno. No pensemos en lo que hay fuera, somos responsables de lo que nos acompaña.

Comentarios

Por si te interesa...

Padre Nuestro en Hebreo

Cinco maneras de organizar un libro de poemas.

Diario de un Estoico II. La posibilidad de lo imposible. Semana 30

Diario de un Estoico II. La posibilidad de lo imposible. Semana 33