No sé si sabéis que todos tenemos a nuestro alcance dos armas muy poderosas: el silencio y la sonrisa. La sonrisa resuelve muchos problemas y el silencio los puede evitar.

Comentarios

Por si te interesa...

Padre Nuestro en Hebreo

Cinco maneras de organizar un libro de poemas.

Diario de un Estoico II. La posibilidad de lo imposible. Semana 30

Diario de un Estoico II. La posibilidad de lo imposible. Semana 33