¿Por qué no dejamos de correr detrás de las cosas como si se acabara el mundo? ¿Por qué no paramos, respiramos, repensamos y luego seguimos? Tal vez lleguemos antes.

Comentarios

Por si te interesa...

Padre Nuestro en Hebreo

Cinco maneras de organizar un libro de poemas.

Diario de un Estoico II. La posibilidad de lo imposible. Semana 33

Diario de un Estoico II. La posibilidad de lo imposible. Semana 30