25.07.2019... Somos!

Aprietan los calores este verano. Las temperaturas nos engullen. Parece que la cabeza se convierte en una olla a presión donde los pensamientos van y vienen rebotando en las paredes del cráneo. 

El poco tiempo del que dispongo todavía, en este verano intenso, lo dedico a mis lecturas filosóficas. Sinceramente son estos textos, escritos por sabios siglos allá, lo único que me enriquece. ¿Qué sería del mundo sin filosofía, sin la esencia del saber? No tienen más que echar un vistazo al parlamento español, sin ir más lejos, que es el ejemplo más básico y representativo de nuestra sociedad.

Leer filosofía te hace cuestionarte, preguntarte.

¿Somos lo que parecemos que somos, o somos otra cosa? 


¿Aparentamos lo que verdaderamente somos?

¿Creemos que somos como nos ven los demás que somos? 

Esta serie de preguntas, y otras, reflexiones en parte de esas que requieren tiempo y valentía, no dejan de ser fruto de esa introspección personal que cada uno de nosotros deberíamos hacer en base a seguir puliendo esa piedra bruta que somos.

¿Quién debe valorar lo que somos? Primero nosotros. Nosotros somos los únicos que tenemos el poder de enjuiciarnos, juzgarnos, criticarnos y exigirnos.

Yo soy consciente de no haber sido, digamos,  lo que se esperaba de mi en prácticamente ningún ámbito de mi vida. Pero ¿soy yo lo que esperaba de mi mismo?

Si uno no es lo que espera de sí, nadie más,  solo él, es el que tiene la capacidad de ser como quiere ser o hacer lo que quiere hacer.

Qué mas da cómo te vean los demás si tu te ves bien. Normalmente es el exterior el que trata de marcar nuestro camino. ¿Por qué no somos nosotros los que escribimos nuestro destino?

Somos según queremos que nos vean los demás por lo tanto no siempre somos como nosotros queremos ser en realidad.

Y nosotros vemos a los demás como nosotros queremos verles y por eso, en ocasiones, prejuzgamos a personas o, en su caso, si no son como nosotros queremos que sean tratamos de cambiarlas.

Debemos escucharnos, debemos confiar en nosotros mismos.

Creer en ti te hace tener tu propio criterio, tus propios pensamientos.

Sé tú. No tienes que ser nadie más que tú. Solo tú.

Habla contigo. Cuestiónate. todo está dentro de ti, solo tienes que cogerlo.

Comentarios

Por si te interesa...

Padre Nuestro en Hebreo

Cinco maneras de organizar un libro de poemas.

Diario de un Estoico II. La posibilidad de lo imposible. Semana 33

Diario de un Estoico II. La posibilidad de lo imposible. Semana 34