¿Cómo es posible que seamos el único Ser que se obligue a dar más de tres veces con la cabeza en el suelo para darse cuenta que está en el camino equivocado?

Comentarios

Por si te interesa...

Padre Nuestro en Hebreo

Cinco maneras de organizar un libro de poemas.

Diario de un Estoico II. La posibilidad de lo imposible. Semana 33

Diario de un Estoico II. La posibilidad de lo imposible. Semana 34