27.09.2018... Acompáñate de fracaso!

Se está haciendo largo este mes de septiembre. Largo y, diría, demasiado cargado de pensamientos y reflexiones que no producen nada más que cansancio físico y mental.

Reflexionar sobre el éxito y el fracaso se convierte en hábito cuando intentas que tus proyectos, que tu vida, vayan en la dirección adecuada. ¿Para unos qué es el éxito, para otros qué es el fracaso? Creo que damos demasiada importancia al fracaso y ello nos hace repensarnos además de generar  miedos que nos paralizan.


Y la verdad es que el fracaso existe.No va a dejar de existir. Pero cada paso siempre  es una oportunidad, aunque tropieces.

El control de la mente, el control de nuestras emociones es indispensable a la hora de comenzar, reactivar o implicarte en cualquier proyecto. Si no controlamos nuestras emociones podemos caer en depresión.

Debemos controlar nuestra percepción del mundo. No podemos controlar que llueva o no llueva, pero sí que podemos controlar la percepción que tengamos de un día lluvioso.

¿Qué sucede en mi, qué pensamientos pasan por mi mente, para crear esa sensación de depresión que a veces nos acompaña? Tienes que estar consciente del momento en el que te alimentas negativamente.
No somos un fracaso. Todos somos un éxito.
Podemos creer que lo tenemos todo y no ser nada. Podemos no ser nada y tenerlo todo. Es una percepción que nos hace pensar de una manera exitosa o como fracasados. Tú eliges tu forma de pensar.

Todo lo podemos alcanzar si queremos.
Puedes alcanzar cualquier cosa que deseas.

Enfócate en aquellos que lo consiguieron antes que tú y sigue su camino.

La razón por la que te sientes infeliz no es lo que te está pasando, sino lo que piensas de lo que te está pasando. Tus pensamientos son los que condicionan tus emociones. De ambos, tú eres el dueño.

El cerebro crea hábitos, busca certezas, se encariña con el pasado. Lo incierto, lo nuevo, la desconfianza son las barreras de la innovación.

El valor de tu éxito es quien eres.

Puedes manifestar cualquier realidad que quieras.

No se trata de lo que sabes sino de quién eres.

No persigas el dinero. Persigue tu propósito y tu por qué.

En vez de complacer a otros comienza a pensar en ti. Complácete a ti mismo. Cuídate.

Enfócate en lo importante.

No dejes de leer. Invierte en tus desarrollo.

No te desesperes. Genera y suma pequeñas victorias. 
Ten metas pequeñas.
Concéntrate en un proyecto y ten éxito en el, no vayas de un lado a otro. No disperses.

Estate presente cada día. No aplaces.

No tengas miedo a fallar, no tengas miedo al fracaso. No lo vas a poder evitar. Relaciónate con los fallos, haz que sean una parte más de ti. Que sumen en tu camino y supéralos. 
El fracaso es una virtud. Del fracaso siempre se aprende.

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