Llegamos muchas veces donde llegamos y no sabemos cómo. Lo cierto es que sabemos por qué y en días como hoy me pregunto: ¿y para qué?

Comentarios

Por si te interesa...

Padre Nuestro en Hebreo

Cinco maneras de organizar un libro de poemas.

Diario de un Estoico II. La posibilidad de lo imposible. Semana 30