Realmente no nos damos cuenta de la importancia que tienen nuestras decisiones hasta que las tomamos. Y debería ser al revés: primero valorar las consecuencias, buenas o malas, y luego tomarlas.

Comentarios

Por si te interesa...

Padre Nuestro en Hebreo

Cinco maneras de organizar un libro de poemas.

Diario de un Estoico II. La posibilidad de lo imposible. Semana 30

Diario de un Estoico II. La posibilidad de lo imposible. Semana 29

700 km en compañía de Reebok ZigTech.