Llegué aquí...
Llegué aquí
sin saber que podía irme
y perder tantos de esos
instantes que abandoné
pensando que poseía
nada.
Porque nada
es lo que traje aquel día
y nada me llevo más
que la sequedad de este cuerpo
el frío inanimado
y un corazón que no latió
cuando yo quería.
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