Dice Henri Nouwen que...

"En lo más profundo de nuestro corazón sabemos que el éxito, la fama, la influencia, el poder y el dinero no nos dan el gozo y la paz interiores que anhelamos. Incluso podemos sentir una cierta envidia de quienes se han desprendido de toda falsa ambición y encuentran una satisfacción más profunda en su relación con Dios. Sí, podemos incluso percibir gustar algo de ese misterioso gozo en la sonrisa de quienes no tienen nada que perder."

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