7.13

7.13. Termina el día de Reyes. Parece propiedad de los niños porque gozan de esa ilusión limpia que les ilumina, esa fe y creencia que los mueve y conmueve en una inocencia que poco después, con los años, vamos perdiendo. Tal vez, si no dejásemos escapar nunca esa pureza infantil, ese mirar inocente, sin maldad, el mundo sería diferente. Tal vez todos seríamos un poco diferentes, en general, porque hoy, cuando miramos a los más pequeños, nos envuelve por unos instantes esa inocencia. No la dejemos escapar.

Comentarios

  1. ‘No hay causa sin motivo ni motivo sin causa’.
    ¿Qué motivó que hoy …X… tenga tal presente?. Vayamos por ejemplo, más cinco años atrás. Allí hubo una de las causas, pero no la primera ni la única que lo determinara, y que pasando inadvertida, fueron desarrollándose otras con el permiso de la ignorancia o desconocimiento de otros hechos paralelos de los cuales en su día no se tomó debida nota. Al no conocerlos, se llega a obtener una falsa experiencia de lo que verdaderamente fue ocurriendo hasta la actualidad. Lo que puede dar motivo a nuevas equivocaciones. Hay quien sí sabe del particular, con el conocimiento de que intervinieron influencias que salieron de sujeto que comienza creando niebla y originando verdades relativas por un lado y contentando dulcemente con dones inteligentes a la vez. La ingenuidad, la que da permiso al seguimiento de los hechos, asegura una aparente experiencia como destino. O sea, y resumiendo: Hay que alzarse siempre al momento en que se fue feliz y estudiar cómo se motivó el principio del cambio y haciéndolo de manera que se admita la posibilidad de que si no se hubiese prestado oído a influjos malintencionados y por supuesto habiendo tomando medidas contrarias a tiempo, el presente sería muy distinto —y todo va en una ciudad… que no capital—. Aun así, puede que en la parte que le corresponde a quien el presente escribe, también recientemente haya percibido su correspondiente equivocación de forma particular, y que por lo tanto y analógicamente ambos habrían sufrido de forma común aunque con sujetos opuestos. La X fue rodeada y no pudo ver más allá de quienes así se comportaron y el segundo recientemente abrió sus ojos a la realidad …por la ley de la gravedad.
    La X sabrá todo cuanto crea debería conocer.
    j.

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