Dice una inscripción grabada en una placa de un instituto de readaptación en Nueva York.



"Yo he pedido a Dios fuerza para triunfar;
Él me ha dado flaqueza, para que aprenda a obedecer con humildad.

Había pedido salud para realizar grandes empresas:
me ha dado enfermedad, para que haga cosas mejores.

Deseé la riqueza para llegar a ser dichoso;
me ha dado pobreza, para alcanzar la sabiduría.

Quise poder para ser apreciado por los hombres;
me concedió debilidad, para que llegara a tener deseos de Él.

Pedí una compañera para no vivir solo;
me dio un corazón para que pudiera amar a todos los hermanos.

Anhelaba cosas que pudieran alegrar mi vida;
me dio la vida para que pudiera gozar de las cosas.

No tengo nada de lo que le he pedido; pero he recibido todo lo que había esperado,
porque sin darme cuenta, mis plegarias no formuladas han sido escuchadas.
Yo soy, entre todas las personas, la más rica."

Comentarios

Por si te interesa...

Padre Nuestro en Hebreo

Cinco maneras de organizar un libro de poemas.

Diario de un Estoico II. La posibilidad de lo imposible. Semana 30

Diario de un Estoico II. La posibilidad de lo imposible. Semana 29