Querido hijo...

Busca tu respuesta a todo lo que dudes o te inquiete. Cada uno tiene la suya. No es mejor, ni peor, posiblemente sea equivocada, pero es tu respuesta.

Comentarios

Por si te interesa...

Padre Nuestro en Hebreo

Cinco maneras de organizar un libro de poemas.

Diario de un Estoico II. La posibilidad de lo imposible. Semana 30