Dice Omraam Mikhaël Aïvanhov que...

“En todo lo que os sucede, tanto las penas como las alegrías, hay algo que descubrir para vuestra expansión, vuestra comprensión de la vida. Y la gratitud es la clave que abre las puertas del verdadero saber. Es por ello que, por la mañana, al despertaros, antes de pensar en cualquier otra cosa, decid: «Dios mío, gracias por haberme dado la vida un día más, afín de que pueda servirte y cumplir tu voluntad, para tu gloria y el advenimiento de tu Reino sobre la tierra.»

Con estas palabras, ya os ponéis bajo la protección del Cielo, dais una buena orientación a todo lo que realizaréis durante la jornada, y encontraréis la buena actitud que hay que tener ante todos los acontecimientos que puedan sobrevenir. No basta con decir «Gracias, Señor» cuando recibís una buena noticia, o cuando recibís alguna cosa que os gusta. Por todas partes y en todo momento debéis aprender a dar las gracias."

Comentarios

Por si te interesa...

Padre Nuestro en Hebreo

Cinco maneras de organizar un libro de poemas.

Diario de un Estoico II. La posibilidad de lo imposible. Semana 30