Dice Omraam Mikhaël Aïvanhov que...

“La existencia personal es algo minúsculo, ¿por qué hacer de ella el centro de nuestras preocupaciones?... ¿Qué son vuestros pequeños problemas en comparación con la inmensidad, la riqueza de esta vida que os ofrece una enseñanza espiritual? Si mantenéis siempre vuestra mirada en vosotros mismos, sobre lo que os gusta o disgusta, sobre lo que os conviene o no os conviene de los demás, nunca os pondréis verdaderamente a trabajar y permaneceréis sumergido debajo de un montón de cosas insignificantes, mientras el espacio infinito se abre ante vosotros.

Dejad de girar alrededor de vosotros, de vuestro consorte, de vuestros hijos, de vuestros parientes, de vuestros vecinos... ¿Creéis que los astros fijan su mirada en vuestra vida familiar o social? Sois vosotros quienes debéis volver vuestra mirada hacia los astros y todo el mundo saldrá ganando.”

Comentarios

Por si te interesa...

Padre Nuestro en Hebreo

Cinco maneras de organizar un libro de poemas.

Diario de un Estoico II. La posibilidad de lo imposible. Semana 30