Querido hijo...

Da siempre las gracias a todo el mundo sea conocido o desconocido, profesor o amigo, jefe o empleado, transeúnte o vecino. Agradecer nos hace más personas.

Comentarios

  1. Que lindo... con tan poco se puede hacer tanto, cómo solo una palabra puede hacernos más felicies a nosotros y al resto del mundo. Sin duda es un excelente consejo.

    Amé tu blog! Te sigo ^^

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Por si te interesa...

Padre Nuestro en Hebreo

Cinco maneras de organizar un libro de poemas.

Diario de un Estoico II. La posibilidad de lo imposible. Semana 30