Viajo del cristianismo al budismo pasando por el judaísmo. Vuelvo y me paro bebiendo lo esencial de cada fuente. Y luego ¿qué cumplo, qué vivo? De qué me vale saber, de qué me vale buscar, encontrar, si luego tiro por otros caminos.

Comentarios

Por si te interesa...

Padre Nuestro en Hebreo

Cinco maneras de organizar un libro de poemas.

Diario de un Estoico II. La posibilidad de lo imposible. Semana 30