Querido hijo...

La felicidad no se compra. Por eso son tantos felices que poco o nada tienen y tantos otros infelices creyendo poseer todo. Por eso aprende siempre a ser feliz con lo que tienes.

Comentarios

Por si te interesa...

Padre Nuestro en Hebreo

Cinco maneras de organizar un libro de poemas.

Diario de un Estoico II. La posibilidad de lo imposible. Semana 30

Diario de un Estoico II. La posibilidad de lo imposible. Semana 29