Josep Mascaró y una Coca-Cola




ABC publica hoy, en su contraportada, una entrevista a este ya famoso protagonista del último anuncio de Coca-Cola de 102 años de edad. Un agricultor que ha pasado el siglo de vida, anónimo en el mundo (hasta hoy), y feliz. Feliz porque la felicidad es eso: vivir los momentos tal y como vienen.

El anuncio nos ha conmovido a todos y todos hemos tratado de conocer un poco más a este buen hombre. Hoy ABC nos regala esta entrevista que he querido reproducir y guardar aquí, en este rinconcillo. Un anuncio, unas palabras, una vida que nos hace pensar:


El hombre feliz
La fama llamó a la puerta de Mascaró Font, al que llaman «Pep de Son Bats», el hijo de Tomeu y Ana, el 29 de diciembre. Tras un casting en Vilafranca, la cámara se enamoró de él, un sabio aunque le cueste poner su nombre y sólo se exprese en mallorquín.


-«Hola, Aitana, me llamo Josep Mascaró y tengo 102 años. Soy un suertudo por haber nacido, como tú».
-Pues sí, nací el 1 de mayo de 1907 en Sont Bats, cerca de Vilafranca de Bonany (Baleares), donde vivo. Me casé a los 29 años con Juana María y toda la vida la dedicamos al campo y a cuidar ovejas. María, como yo la llamaba siempre, falleció muy pronto, a los 52 años, aunque tuvimos tiempo de tener cuatro hijos y dos hijas; todos ellos casados, con hijos, incluso con nietos, por lo que mi familia es bastante numerosa, aunque tampoco sobra ninguno... Pues mire, en total somos seis hijos, seis yernos/nueras, 33 nietos -los propios y sus parejas-, 28 biznietos y otro en camino, lo que significa que la familia suma y sigue...
-¿Y qué, cómo le va la vida, don Pep?
-De la vida no me puedo quejar porque tengo salud y me puedo valer solo. Aún disfruto de cuidar el campo, ir en bici, hacer gimnasia, voy a bailar y..., en fin, lo que deseo es salud para el tiempo que me queda.
-¿De dónde saca tanta energía?
-Procuro hacer las cosas bien, rodearme de mi familia y amigos y aprovechar cada minuto de la vida, sin entretenerme en las tonterías porque es verdad que el tiempo corre muy deprisa.
-Cuénteme qué hace un día cualquiera.
-Si hace frío me levanto más tarde, después cojo la bicicleta y acostumbro a ir a trabajar un poco al campo. Luego, por las tardes, acudo al bar para pasar el rato, y miro jugar a cartas.
-¿Sigue una dieta especial?
-Qué va. Gracias a Dios puedo comer de todo lo que me apetece y tengo la suerte de que nada me sienta mal; en cuanto a beber, tampoco me pasa nada por probar de todo, bebo lo que quiero (se ríe), aunque mejor si el líquido es de un color oscuro...
-Más de un siglo da para mucho, pero tendrá en su memoria momentos especialmente maravillosos.
-Si se quitan los malos, todos los demás son buenos... Aunque especialmente yo me quedaría con el nacimiento de un bebé.
-La amargura también le habrá rondado.
-Cuando he visto a gente que sufre y la desaparición de los seres queridos. Voy a todos los funerales.
-¿Es un hombre religioso?
-Voy a misa cada sábado y desde el primer banco recibo la bendición.
-Sé que tuvo un amor tardío, a sus ochenta, una dama a la que conoció durante las excursiones para mayores y que también se marchó para siempre. Me lo ha contado su hijo Pep. ¿Se puede vivir sin amor?
-No. El amor debe estar en todo. Las cosas si son con amor, normalmente todas son buenas.
-¿Y el humor?
-Soy muy bromista y me tomo las cosas con alegría. Los que me rodean dicen que siempre me ven contento.
-¿Su última preocupación?
-Pensar que no volvería a ver a Aitana, el bebé del anuncio, que es de Madrid, pero la van a traer de vacaciones a Mallorca.
-También me han soplado que es usted un gran bailarín.
-La verdad es que siempre se me ha dado muy bien bailar cualquier cosa, desde jotas a mateixes; pero de quedarme con alguno lo haría con los bailes agarrados, ¡es más difícil caerse!
-¿Algún consejo?
-Prefiero dar las gracias: a mi familia, a mis amigos, al Ayuntamiento de mi pueblo, a los de la productora McCan, a Coca-Cola, a los clubs de fans, a mi agente, Yolanda Fuster, y a todas las personas a las que mi testimonio ha emocionado. Un beso para todos.

Fuente ABC 15 abril 2009

A cada uno le llegará de una manera, cada uno sacara sus propias conclusiones. Yo creo que todo está inventado en eso de la felicidad, que todo es más simple de lo que creemos o de lo que hacemos o buscamos: la felicidad está aquí, a nuestro lado, en nosotros mismos. Sólo debemos de querer, de elegir, de vivir, de intentar pensar en que cada momento es único y cada instante pasa sin volver. ¿Por qué dejar pasar tantos? A vivir desde el primer día porque estamos aquí para ser felices y hacer felices a los que nos rodean; a vivir cada momento porque cada momento presente es único en nuestras vidas.

Comentarios

  1. Tan de acuerdo contigo! En las cosas simples està todo! y lo complicamos tanto!!!!! se puede vivir con simpleza pro para llegar a ello hay veces que nos toca atravesar montañas con vientos en contra, todo depende como estemos preparados sentimentalmente para cruzarlas. La familia, los amigos que gran acompañamiento. cada vez mas!!!! un abrazo
    Buen domingo
    Me encantò tu entrada!

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  2. Un ejemplo del saber vivir. La felicidad consiste en buscar en lo cotidiano todo aquello positivo , disfrutarlo y vivirlo para poder compensar los momentos amargos que también tiene.

    Este hombre lo ha conseguido, a raiz de lo que nos cuenta y de su aspecto afable y tranquilo.

    Un saludo

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  3. Simplemente hermoso todo este tema, incluso sin haber podido ver el video de Coca Cola

    Un saludo desde este Medellín, al otro lado del mar

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