Viajé
fui y vine
llegué
acampé
y descubrí la magia
su magia
y volé...
...tras aterrizar
vi
y me encontré

sentado en pie
acariciando lo etéreo
y caminé
posado y pausado
capaz
ilimitado...

y amé
en ese momento
en el que casi
me vuelvo
pero corrí
corrí más deprisa
para no caer
y no caí
porque me agarré
a ti.

Comentarios

  1. Y seguro que esa mano no te suelta.
    Rítmico..
    Dinámico.
    Haces parícipe al que lo lee.
    Me ha gustado mucho
    Besos

    ResponderEliminar
  2. Pues no corras tanto terrícola y siéntate a ver entrar y salir los barcos de la bahía

    ResponderEliminar
  3. Gracias Leni, siempre agrada hacer sentir...

    ResponderEliminar
  4. Siempre es bueno tener a alguien a quien aferrarse.
    Muy bonito.
    Un beso.

    ResponderEliminar
  5. Me ha gustado mucho. Son esas situaciones en las que a uno le gustaría estar cuando las lee, vivirlas. Ojalá tuviese yo una mano que me sostuviera ahora mismo.

    Un saludo :-)

    ResponderEliminar
  6. acariciando o etéreo... Lindo!
    Desculke, não escrevo bem em seu idioma...r. Mas compreendo quase tudo.
    Beijos.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Por si te interesa...

Padre Nuestro en Hebreo

Cinco maneras de organizar un libro de poemas.

Diario de un Estoico II. La posibilidad de lo imposible. Semana 30