Hoy podría ser
uno de esos días,
como el de ayer,
pero no lo es.



Hoy que el cielo
se ha cubierto de ceniza
para ensombrecer esta vida.



Hoy que mis manos
se han arrugado tanto
que su movimiento me duele.



Hoy que todas esas luces
me deslumbran estos ojos
que se cierran tan aprisa.



Hoy
no es uno de esos días
es el que es
el que tiene que ser
el día.



Hoy
es ese día
el que debe ser
tan diferente a los demás
el único distinto
a todos los vividos.



Hoy es diferente
y tal vez lo sea
porque ya no vivo.

Comentarios

Por si te interesa...

Padre Nuestro en Hebreo

Cinco maneras de organizar un libro de poemas.

Diario de un Estoico II. La posibilidad de lo imposible. Semana 30

Diario de un Estoico II. La posibilidad de lo imposible. Semana 29