02.07.2017... Preguntas y Respuestas...

La verdad es que llego al final del domingo algo cansado, pero medianamente contento. He estado inmerso todo el fin de semana en estudios y lecturas sobre temas que me interesan personalmente y que, además, me son necesarios para las conferencias que preparo.

El coaching es algo que normalmente revuelve el interior. El coaching se basa en preguntas y respuestas y esas respuestas solo las tiene uno mismo.

Me doy cuenta que no solemos parar a hacernos esas preguntas vitales, muchas veces por miedo, por ese miedo que nos genera encontrarnos con nosotros: encontrar la verdad.

No es fácil que uno mismo se interrogue, aunque creo de especial importancia parar en nuestra actividad, de vez en cuando, y hacerlo. Cuando sentimos esos bloqueos, esas crisis que nos vienen dadas por motivos externos, unas veces, pero otras por motivos internos, lo mejor es parar y meditar: preguntarnos.

¿Qué hacemos cuando algo se nos ha pegado en la sartén? Echamos agua y esperamos a que se despegue para limpiarla mejor. Debemos dedicar tiempo a nosotros. Esa parada, ese instante en el que echamos en nosotros un tiempo de preguntas, de silencio, de reflexión y meditación, nos puede servir para limpiarnos y continuar.



Nos perdemos. Nos perdemos en mil cosas y olvidamos nuestro propósito del por qué estamos.

Hace tiempo anoté unas frases, unas preguntas, que utilizo en mis sesiones, porque creo que de vez en cuando parar a responder nos ayuda a volver a definir o, incluso, descubrir, nuestro propósito. Cada uno de nosotros debería responderlas y anotarlo en un papel para así, al menos una vez al año, volver a leer las respuestas: 

1. Si pudiera hacer una cosa en mi vida sería…

2. Si pudiera hacer una contribución importante en mi trabajo o deporte sería…

3. Algo que me gustaría cambiar en mi alrededor sería…

4. Si pudiera cambiar algo en el mundo sería…

5. Si mi vida se acabara en un año y quisiera ayudar a alguien, ¿Qué haría?

6. Si no necesitara dinero para vivir y empleara mi tiempo aportando mi conocimiento y experiencia ¿con quién lo haría ¿dónde lo haría?

7. Si tuviera que donar una gran fortuna ¿qué criterios seguiría para dar mi dinero?

8. ¿Qué cosas que hice me gustaría que recordaran de mi cuando ya no esté?

9. ¿Qué legado es el que me gustaría dejar?

10. En definitiva, ¿para qué existimos y para qué estoy yo aquí? 

Os animo a responder e, incluso, a reflexionar sobre las respuestas.

Tener un propósito claro en nuestras vidas nos ayuda a enfrentarnos con fuerza a nuestros desafíos diaros y tomar decisiones.

No tener un propósito nos confunde, nos desvía del camino.

Debemos encontrar nuestro sentido.

Y hoy os dejo esta canción de esas que me motivan...

Comentarios

Por si te interesa...

Padre Nuestro en Hebreo

Cinco maneras de organizar un libro de poemas.

Diario de un Estoico II. La posibilidad de lo imposible. Semana 30

Diario de un Estoico II. La posibilidad de lo imposible. Semana 29