Dice Edith Stein que...

“Deposite confiadamente todas las preocupaciones sobre el futuro en las manos de Dios y déjese guiar por Él como un niño. Entonces esté seguro de que no puede errar en el camino”.

Comentarios

Por si te interesa...

Padre Nuestro en Hebreo

Cinco maneras de organizar un libro de poemas.

Diario de un Estoico II. La posibilidad de lo imposible. Semana 30

Diario de un Estoico II. La posibilidad de lo imposible. Semana 29