Running Getafe y Casa de Campo... y 10: 59.39 km.



Las semanas son como son, no puedo preguntarme por qué quedan así o pasan así, nadie sabe, aunque sí puedo reconocer que suponen un rodaje discontinuo, desordenado: como los días, con altos y bajos. El running puede llegar a convertirse en un reflejo de nuestro día a día, de nuestro estado mental y/o emocional: si estamos bien vamos a tope, si mentalmente, por los motivos que sean, bajamos, nos descontrolamos y no encontramos el orden ni el ritmo adecuado de entrenamiento.

Así ha sido mi semana: discontinua. Hasta el viernes que, mentalmente centrado y profesionalmente 'pasado', tomé las riendas de todo. A lo mejor también influía la llegada del fin de semana. Vaya usted a saber.

El caso es que de todas mis salidas de estos días 'marzianos' me quedo con la de ayer domingo. Volví, volvimos, a la Casa de Campo. Volví a encontrarme mentalmente especial y volví a rodar con la fuerza que me suele caracterizar normalmente. No estuve solo... la compañía de Celemente me motiva y consigue que los kilómetros sean menos sacrificados. Nos falta un Moreno en el Club Moreno´s Running... llegará.

Ayer fue un día tan peculiar como que cuando levanté, a las 7.30h, para tomar algo antes de la salida, el reloj todavía marcaba las 6.30h del día anterior. Quiere decir que fue la noche del cambio de hora 'jodida': se duerme una menos. Pero no me costó mucho, aunque sí reconozco que chocó bastante sacar a dar el paseo a Mozart con una oscuridad parecida a la de la noche pasada.

Merecía la pena. Todo merece la pena en la vida. El ritual estaba en marcha: vestirse tratando de no hacer ruido, desayuno suave (tostadas con aceite, zumo de naranja, kiwi) y pronto para digerirlo antes de comenzar a correr, paseo con Mozart a una temperatura excesivamente baja para lo habitual en estas fechas, cafetito negro en la soledad de la terraza mientras amanece y... salida hacia la Casa de Campo.

Llegué poco antes de las 9h, lo que serían las 8h de ayer. Exceso de puntualidad, como siempre, como es mi vida. Fui de los primeros ya que he podido aparcar pegado al lago y no había el ambiente habitual. También influye el inicio de las vacaciones de Semana Santa, además del ya mencionado cambio de horario.

Poco a poco el descampado se va llenando de coches. Los veo llegar con ese ritmo lento, tranquilo. Todavía hace frío y la sensación de humedad acompaña los primeros movimientos del día. El sol se refleja sobre la película de agua. Unos corredores solos, otros acompañados, despacio, sin prisa, comienzan a correr en el despertar del día... Un movimiento común: apretar el botón de start del reloj y ya... hasta dentro de una hora, de hora y media o dos, cada uno su tiempo, cada uno sus kilómetros, no se apretara el stop .
Es uno de esos momentos mágicos que te ofrece la vida. Puedes tomarlo o no, puedes dejarlo pasar... pero miras el cielo y agradeces a los dioses, cada uno al suyo, a ese Gran Arquitecto de la Vida, poder estar ahí, respirando, sintiendo, sufriendo, buscando el limite de tu cuerpo, de tu mente... Te hubieras quedado en la cama, en este domingo, como la gran mayoría... pero aquí estas, como muchos otros, envuelto en oxígeno y sudor, sintiendo la paz que provoca escuchar cada latido de tu corazón...
A las 9.10h llega Clemente y, sin pensarlo mucho, comenzamos a correr con la pretensión de volver a hacer el perímetro de este pulmón madrileño. Vamos a nuestro ritmo, tranquilos, adaptando los músculos en los primeros minutos. Hace frío, las manos no entran en calor. ¿Cuándo coño cambiará el clima? Clemente no para de hablar en el primer kilómetro, siempre temas interesantes, siempre buscando la profundidad de las palabras bajo el silencio que marca el ritmo de rodaje. A los dos kilómetros sólo se escucha nuestra respiración y parece el cuerpo ha entrado en calor. Vamos algo jodidos, no sé, como si nos costara más de lo normal cada kilómetro, cada cuesta. Vamos en dirección La Coruña y las subidas son bastante inclinadas.
La tapia se hace eterna mientras el sol refleja nuestas sombras... La sombra del corredor, esa sombra dónde no se ve el esfuerzo, el sudor, pero se siente el ritmo que se va alargando a medida que pasan los kilómetros.
Cierto es que igual que subes bajas, aunque no llegamos a saber si esta dirección será más o menos cómoda que la contraria. Hoy no nos cruzamos con muchos corredores. Los primeros kilómetros me cuestan muchísimo, no voy lo cómodo que me gustaría. A partir del 9/10 km comienzo a disfrutar y, llegando al final de nuestra carrera puedo decir que tengo fuerzas para apretar el ritmo y correr un kilómetro más de regalo alrededor del lago.
Hemos terminado haciendo algo más de 19 km y con esa sensación de paz, de orgullo, de alegría, que queda cuando te das cuenta que si quieres puedes. Y la mañana se convierte en una sonrisa y llegas a casa cantando y feliz... todo gracias a un madrugón y unos kilómetros de libertad. Y siento que comencé la semana mal pero la terminé a gusto, contento. En casa espera la familia y es suficiente para tener esa sensación de máxima felicidad, de plenitud...
Y esta semana discontinua queda así:
  • Lunes 1h:3':48" 11.84 km
  • Martes 1h:1':46" 11.46 km
  • Viernes 1h:23'.56" 16.37km 5.08min/km
  • Domingo 1h:43'.41" 19.72 km 5.16min/km
Al final no ha estado mal, me faltó un día de salida pero los kilómetros son razonables. El total de kilómetros la semana del 22 al 28 de marzo ha sido de 59.39 km a un ritmo medio de 5.20 min/km.

No ha estado mal, no me quejo. A seguir....

Comentarios

  1. Preciosa entrada, me gusta ese desayuno. Son registros para 3:45 en maratón. Buena semana

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  2. No es que no ha estado mal... Ha estado muy bien! Menuda kilometrada! y a qué ritmos...

    A seguir siguiendo

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  3. Viernes y domingo has sacado dos rodajes muy buenos, a unos ritmos muy altos, especialmente el viernes. La verdad que la semana las has hecho muy bien, o sea que de semana discontínua nada de nada sino todo lo contrario. Esta semana es complicada de correr, ¡llegan las torrijas¡, unas grandes enemigas del runner.
    Mi consejo: ser fuerte ante la tentación y comer como máximo diez al día, no más.

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  4. sería un placer tenerle como colaborador en getafehoy Se anima??
    www.getafehoy.es

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